LLENO POR FAVOR!


El crédito es para la economía como la gasolina para un automóvil. Sin él, tanto empresas como particulares lo tienen realmente complicado para avanzar. Nuestros bancos y cajas han cerrado el grifo de manera drástica y radical, pese a que resulta que son la mar de solventes. Todo un ejemplo de previsión a nivel internacional y, además, no ha sido preciso recapitalizarlos, como tantos otros bancos de Estados Unidos, Inglaterra, Alemania o Suiza.

Los bancos españoles no tienen activos tóxicos derivados de la alegría crediticia americana, sus posteriores titulizaciones y la innovación financiera. Como mucho, sufrirán el excesivo apalancamiento del sector inmobiliario nacional. Además, el tipo de interés oficial fijado por el BCE está bajando. Hasta el Estado les asegura cobrar los préstamos que den a otros bancos, tras una actuación coordinada sin precedentes de todos los países de la Unión Europea.

El siguiente paso en este proceso de rescate debe ser exigir a las autoridades una legislación que asegure que esas ayudas directas se van a trasladar a la economía productiva, es decir a familias y empresas; y evitar que los fondos aprobados vayan a parar directamente a los balances de las entidades o bien a amortizar el capital pendiente de devolver antes de fin de año. Sabemos que el crédito no volverá a fluir a granel como en el pasado, pero va siendo hora de poder volver a llenar el depósito.

La contradicción de la DGT


La DGT duplicará sus ingresos en 2009 mientras reducirá sus inversiones en Seguridad Vial casi un 2%

La Dirección General de Tráfico (DGT) prevé recaudar el año que viene 416 millones de euros en multas y sanciones, un 15,5% más que en 2008, según consta en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009. Las cifras contrastan con los 192 millones recaudados en 2006, año anterior a la puesta en marcha del carné por puntos.
Por contra, el recorte del gasto público presupuestado por el ejecutivo en los PGE se verá reflejado en la partida destinada a la Seguridad Vial, que caerá en 2009 un 1,8 por ciento con respecto a 2008.

No obstante, las tasas que cobra la DGT seguirán siendo su principal fuente de ingresos, un 56 por ciento del total, que ascienden a los 966 millones de euros. La DGT continúa trabajando, eso si, para aumentar y agilizar el cobro de las sanciones de tráfico, gracias, entre otras medidas, al despliegue completo de los nuevos radares de control de velocidad. A finales de este año funcionarán unos 500 radares fijos y se prevé llegar a los 1.500 entre 2009 y 2011. Además, será posible la notificación de una denuncia a través de internet y el pago de la multa mediante tarjeta de crédito en la misma vía pública. La DGT creará una oficina virtual en la que se podrán consultar los expedientes o presentar recursos.

El objetivo es que las sanciones lleguen en menos de 15 días al infractor, dictar la resolución en un plazo máximo de 2 meses desde que se presentan alegaciones y resolver los recursos en menos de 3 meses. Con ese escenario, la DGT prevé retirar el carné a 250.000 conductores el año que viene, y quitar algún punto a casi un millón más.